27 junio 2006

Estau de la región

Casi dos horas y meya parlando de Cantabria y ni una parabra. La cultura en Cantabria s´acabó nel Soplao y el Racing; ná más. Jacer juntura en una mesma consejería de la cultura y el turismu y el deporte supón escomenzar mal. Entre esos dos gigantones que alampan cuartos asgaya dejan soluca a la cultura y claru, acaba comu tenía de acabar. Muncha carrera, muncha pista, muncho cementu… pero la cultura juesi. Y cultura no quier icir pocu: son bibliotecas, museos, archivos y muncho más. Comu esi garajón de la Calle Castilla que tuvía no se estrena; o esi expediente de la declaración de Bien Cultural para las hablas de Cantabria; o los incumplimientos de la Ley 11/98 de Bienes Culturales… Y todo por un consejeru derrochón que si no hay fotu no apaez y unos pulíticos farolones que se dan el pistu por jacer lo mínimu.
Vos alcordaredes de nos en 2007, pero ¡cuidu!, no seremos esmemoriaos…

20 junio 2006

Tierra verde

A los que aún nos duele nuestra tierra verde
En la bolera empieza a crecer una yerba de campo silvestre. Ya no se oye el tintineo de la pequeña fragua ni el pregón largo del lencero, bromista errante de los valles. Ni se abre la puerta de la taberna…

Yo no sé adónde han ido a parar las jaulas del corredor del capellán con unos ruiseñores que cantaban a sus amigas las estrellas.

¿Qué ha sido de las cruces del cementerio?

Cruces bajitas, toscas, sin pintar, de vagabundos viejos que murieron en la orilla de la carretera, debajo de los puentes, en los establos. Cruces blancas de niños y de doncellas…

Caras que hacen pensar en cosechas perdidas, en bienes que se están fugando, en sobresaltos recientes, en malos presentimientos. Rostros que recuerdan penitencias, fatigas inesperadas, tardanza de las cosas que más se desean o cercanía de las cosas que más se aborrecen, perplejidades de inocentes, entusiasmos que se van perdiendo, dudas y protestas que no se atreven a salir de la imaginación…

Los ojos no miran como hace veinte lunas.

Ojos que han perdido su estilo de mirar dulcemente a la recolección en promesa. El mirar de hora es como si allí, en aquella tierra verde, se hubiera perdido la inocencia de hija, como si entre las espigas se escondieran asechanzas obstinadas de malos ojos, enemigos de nuestra paz…
Manuel Llano. Dolor de tierra verde: pérdidas

13 junio 2006

Generar contenidos

En montañés se escribe poco y mal. Apenas hay artículos serios y elaborados y los clásicos ya han sido releídos en demasiadas ocasiones. Es necesario comenzar a generar contenidos, a utilizar el lenguaje escrito (muy diferente del hablado que es el que se habitualmente utiliza en foros) para comenzar a dar pasos en el acaldau de nuestra lengua. Generando contenidos se unificarán criterios, se establecerán pautas, se creará opinión y surgirá la controversia. La cuestión es encontrar un medio a la vez barato y eficaz capaz de distribuir estos textos. Internet está muy a mano. La oportunidad, esperando a que alguien la tome.

06 junio 2006

Que viene el lobo

No se deja de esgrimir por parte de muchos políticos de las perniciosas consecuencias que tendría el promover nuestras hablas por lo que supondría de auge nacionalista. Según este esquema, a más conocimiento del montañés, más nacionalismo. Y con el nacionalismo, imposición de esa lengua: desde los rótulos de las carreteras hasta las escuelas, pasando por organismos públicos y demás. Un panorama desolador en el que el castellano quedaría marginado y la nueva lengua impuesta a la población.

Pero a poco que uno reflexione y se interese por ello, descubre que esta predicción es solamente una invención interesada. No sólo porque la situación real de las hablas de Cantabria impida gran parte de esas supuestas políticas de imposición (no existe ni gramática ni diccionario ni hay normalización ¿qué se iba a imponer?) sino porque se exageran las pretensiones nacionalistas. Que se declare como tal sólo existe un partido político en Cantabria, el Conceju. Asustan las ues a muchos pero en sus políticas de base (según recoge en su web www.conceju.org) el tratamiento del montañés es más que moderado:

El cuidado y fomento de la lengua es un derecho fundamental de los pueblos. Desde el CNC exigimos por parte de los organismos públicos un compromiso serio para su recuperación, estudio y reconocimiento.

Recuperación, estudio y reconocimiento. Se podrá estar en desacuerdo con el nacionalismo cántabro, pero está claro que acusarle de intentar imposiciones en materia lingüística es puro invento para asustar. Y cuando los de siempre griten ¡que viene el lobo!, sabremos que nos están tomando el pelo porque los lobos hace ya tiempo que están entre nosotros.