¿Y abora ondi dirá el cuchu las palomas?
Por apurrir daque ideas, sedría guenu que pinaran una estatua con la que pudieran identificase todos los sananderinos. ¿Qué tal alcordase de la decensa por caltener las sus libertades en el siglu XV? Cuando el rey Enrique IV jue a devolver favores al Marqués de Santillana, le entregó la ciudá de Santander que siempre estuvo baju realengu. Barruntando que perdían los sus drechos ante un señor feudal los sananderinos se levantarin y derrotarin a las tropas del marqués que no juerin pa aplicar por la juerza la real orden. Al final el rey revocó la decisión, caltuvo las libertades de Sanander y le dió el títulu de muy noble y muy leal que tuvía apaez en el su escudu.
Mejor que Franco, ya sedrá
1 comentario:
Entuvía ta por versi. Yo presonalmenti no tenulo claru del tou. Jhasta que no jipiemus el sitiu limpiu de la estatua´l homicida, yo no creome ná.
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